Santuario de la Fuensanta

Espacio emblemático de Murcia

En esta ocasión os voy a hablar de un sitio emblemático de la Región de Murcia. Sin duda alguna este Santuario, por su ubicación y por su historia, es visita obligada para todo aquel que visite nuestra Región. Más adelante os cuento donde está ubicado, pero sin dar muchos más detalles, que sin duda alguna podremos encontrar en Google.

Me centraré más en otros detalles que pienso son más importantes, por lo menos para mí.

SU UBICACIÓN

Este Santuario está situado en un lugar privilegiado de la ciudad de Murcia. Situado este en la pedanía de Algezares, a unos tres kilómetros de la capital del segura.

Su entorno es como bien he dicho antes, muy privilegiado. Para acceder, debemos subir una carretera muy bien asfaltada, que nos lleva directamente a la explanada del Santuario.

PORQUE ES ESPECIAL PARA MÍ ESTE SANTUARIO

En primer lugar, porque la Virgen de la Fuensanta es la patrona del Murcia y pasa dentro de éste Santuario casi todo el año. Pero es cierto que nuestra patrona baja a la capital una vez al año, en romería, por supuesto. Pasado un mes y coincidiendo con las fiestas de primavera de Murcia, nuestra patrona vuelve a su Santuario, escoltada por cientos de murcianos. Es todo un espectáculo ver como la suben por esas rampas tan empinadas, hasta introducirla dentro del Santuario. Pero tiene su riesgo subir este paso tan pesado por esas rampas, y si el firme está mojado, ya no os cuento nada.

Pero este Santuario tiene algo que lo hace especial. Y si no, se lo podemos preguntar a los cientos de novios que solicitan casarse en su interior. Aquí las solicitudes se acumular por miles, y por supuesto, se tienen que hacer con uno o dos años de antelación, de lo contrario, naranjas de la china. Y como dice el Párroco !denos la voluntad¡ que por cierto, no puede estar por debajo de doscientos eurillos de nada, más arreglos del Santuario, claro. “Pues menuda voluntad debemos tener”….

Habéis oído hablar alguna vez que la ciudad de Murcia está situada en una cañada. Efectivamente, si nos situamos en el mirador de este Santuario, podremos observar a lo lejos la Capital Murciana y su catedral, por cierto, si nos damos cuenta, efectivamente, la capital está en una hondonada, en la cual, su punto más bajo es el Rio Segura. Por eso los antiguos decían que Murcia era la cañaica del segura.

Como podéis ver, este Santuario es el mirador perfecto, y como no, todo lo que le rodea, es el pulmón de Murcia.

Pero si ascendemos por esta carretera que nos lleva al Santuario, y no nos detenemos en él, podremos llegar a lo que es conocido por los murcianos, como La Cresta del Gallo, situado a unos cuatro kilómetros del Santuario. Por cierto, le dicen La Cresta del Gallo porque situados en el Santuario, por su cara posterior, y mirando hacia la sierra, podemos atisbar como una cresta de gallo perfectamente dibujada por los picos de la sierra, aparece entre los pinos.

Mi interés por este Santuario es muy grande, es raro que no lo visite casi todos los meses. A mí personalmente me encanta, tanto su entorno como sus instalaciones. Se respira una tranquilidad muy pronunciada. Sus pinares que lo rodean, todavía lo hacen más especial, el aire que se respira es muy sano. La verdad que pasar un domingo con los amigos en este lugar es genial.

Pero tengo que resalta alguna que otra anécdota, sobre todo con su inquilina más carismática, nuestra patrona. En épocas de sequia, se suele recurrir a esta Virgen para que nos traiga la tan ansiada agua, a veces da resultado y otras no tanto. Pero la intención es lo que cuenta y es cierto que hay veces que la fe mueve montañas y con esta virgen así ha sido.

Y os cuento otra anécdota; como sabéis, en Murcia tenemos un equipo de fútbol, por cierto, en la actualidad ya no es profesional, el Real Murcia, descendido este año de categoría. Pues este equipo, el de todos los murcianos, cuando consigue un éxito, suele ir a este Santuario a ofrecérselo a nuestra patrona. Cierto es que son pocos los éxitos que consigue nuestro Real Murcia, pero siempre que asciende o al comienzo de cada campaña, siempre pasa por sus dependencias. Por cierto, este año no ha servido de mucho, pero como dice el refrán, “quien siembra vientos, recoge tempestades”.

Mi última visita a este Santuario fue precisamente hace diez días, estuve una tarde de domingo en sus mirador, tomando unas fotos con los amigos y como no, merendando por sus alrededores, que por cierto, tenemos unas cocinas geniales, aunque en verano no se pueden usar, por el tema de los incendios.

Os comento mi última visita, porque mucha gente hace muchas promesas, sobre todo a la Virgen de la Fuensanta, nuestra patrona. La verdad que yo no soy de hacer muchas promesas, si tengo que ir voy y punto, pero se de gente que se ha subido el kilometro y medio que separa Algezares del Santuario, de rodillas, y os puedo asegurar que tenemos una rampa considerable, como de un 8 o 9 por ciento. He de reconocer que yo hasta aquí nunca he llegado.

Por cierto, estos detalles los he visto principalmente en la romería de Abril, cuando se sube a la virgen desde la Capital. Es alucinante ver subir de rodillas a la gente, llegan al Santuario con las rodillas destrozadas.

Hablando de la romería, es cierto que con el tiempo esta fiesta o “romería” ha ido desfasando. En la actualidad son muchos los romeros que suben acompañando a la virgen, pero estoy por decir que más del cincuenta por ciento pasan de la virgen y del Santuario, y sobre todo ese día, lo único que buscan es diversión y pasárselo en grande. Hace unos 20 años, la romería era mucho más sana y la gente acudía al Santuario por ver a la virgen, eran auténticos devotos de esta virgen. Pero esto es lo que toca en estos tiempos que corren.

Os he contado por encima lo que opino yo de este emblemático Santuario, sin duda alguna merece la pena visitarlo, y por supuesto también su entorno.